Be Generous and Prudent with Parish Commitments

09-10-2023NewsInternational Catholic Stewardship Council

For millions of kids in the Northern Hemisphere, September marks the beginning of school. Little ones bid a teary farewell at the kindergarten door, and college students embark on their first steps towards adulthood. For everyone in between, it’s a time when the lazy days of summer are transformed into a season of routines, schedules and commitments.

The same goes for grown-ups, even those of us who don’t have kids. If you’re not being besieged to sign up for a long list of volunteer opportunities at school, sports or scouts, your parish may be gearing up for the ministry fair and “commitment Sunday.” A good steward will approach this season of “sign-ups” with the right attitude and prayerful reflection

Here are some considerations for using your gifts of time and talent wisely and generously: a smart person once said that your vocation is the place where your greatest happiness intersects with the world’s greatest need. So commit yourself to something you can get excited about. Don’t sign up from a guilt complex, or a “nobody’s going to do this so I guess I should” frame of mind. Feel free to try something new; don’t think that since you joined one committee last year, you’re stuck for life. Be generous with your time, but don’t over-commit. Think of the time you spend surfing the web or watching television, and then think about how you can channel some of that time into service for your parish family. Just don’t overbook yourself.

Remember that stewardship of your family, and taking care of your own spiritual health, are of primary importance. Be selective about the parish commitments you make, and then give yourself whole-heartedly and efficiently to your chosen role. Be a person your committee can always count on. And when you’re pondering commitments, don’t forget to consider the commitments of your whole family and how they intersect. Today’s kids are often over-booked, and all these “sign-ups” should never take away from family nights around the dinner table and evenings spent together. Plan a family discussion, and family prayer, before everyone plunges into a fall and winter of busyness. Make this year’s commitment of time and talent enriching for all!

Sea Generoso y Prudente en sus Compromisos con su Parroquia

Para millones de niños en el Hemisferio Norte, septiembre marca el inicio de clases. Los pequeños se despiden con lágrimas en sus ojos en la puerta del Jardín de Niños, y los estudiantes universitarios se embarcan en sus primeros pasos hacia la edad adulta. Para el resto, en medio de estas etapas, es tiempo en el que los días de letargo del verano se transforman en una estación de rutinas, agendas y compromisos.

La misma situación se presenta para los adultos, incluso aquellos de nosotros que no tenemos niños. Si usted no ha sido asediado para participar en una larga lista de voluntariados en la escuela, en los deportes, o en los scout, su parroquia tal vez esté reuniendo el equipo para la feria del ministerio y el “compromiso del domingo.” Un buen corresponsable se acercará a está estación de “alistamiento” con actitud correcta y reflexión piadosa.

Aquí encontrará algunas consideraciones para usar sus dones de tiempo y talento sabia y generosamente: una persona inteligente una vez dijo que su vocación es el lugar donde su mayor felicidad concurre con la mayor necesidad del mundo. Comprométase con usted mismo a hacer algo que le motive. No se aliste con un marco mental de complejo de culpa, o pensando “nadie va a hacer esto, así que creo que yo debo hacerlo.” Siéntase libre de tratar algo nuevo, no piense que porque se incorporó a un comité el año anterior, usted está obligado toda su vida. Sea generoso con su tiempo, pero no se comprometa más de lo que puede. Piense en el tiempo que usted dedica a navegar en la Web o a ver televisión, y piense cómo puede canalizar algo de ese tiempo en servicio de su familia parroquial. Solamente no se sobrecargue de compromisos.

Recuerde que la corresponsabilidad de su familia, y el cuidado de su salud espiritual, son de importancia fundamental. Sea selectivo acerca de los compromisos que usted hace con la parroquia, y entonces entréguese con el corazón y con eficiencia a su rol elegido. Sea una persona con quien su comité siempre pueda contar. Y cuando esté ponderando sus compromisos, no olvide considerar los compromisos de toda su familia y cómo se cruzan entre sí. Los niños de hoy están sobresaturados, sin embargo, todos estos “alistamientos” nunca deben separarlos de las tardes familiares alrededor de la mesa para cenar, ni de compartir las noches juntos. Planee una discusión y una oración familiar, antes de que cada uno se sumerja en su otoño e invierno de ocupaciones. ¡Haga que el compromiso de tiempo y talento de este año, sea enriquecedor para todos!